martes, 20 de diciembre de 2011

El efecto de la condición humana sobre la disposición y percepción del espacio


          El ser humano tiene la necesidad de relacionarse; éste necesita ser comunicativo y socializar con su entorno humano. Para que ocurra tal acción de relacionarse se necesita dos o más personas. De esta manera comienza a crearse un sentido de comunidad, el cual se compone de redes de comunicación, una infraestructura de relevancia para realizar ese sentido de urbanización. Así se puede apreciar en la lectura de Italo Calvino donde el entorno físico puede ser cambiante pero las redes de comunicación e interacción crean telarañas de relaciones intrincadas que buscan una forma. Es de esta manera que comienza la relación de comunidad entre los humanos.
          Mas un sistema urbano va más allá de lo mencionado, puesto que necesita un orden; para poder tener funcionamiento de la comunidad los humanos necesitan ordenarse dentro de un espacio. Siendo el espacio en el cual se asiente un grupo de personas formando comunidad necesita tener un orden físico y comunitario. Este ordenamiento existe en una jerarquía, se establecen poderes que dan coherencia a su ambiente. Cada habitante responde sobre sus responsabilidades queriendo tener el bienestar de su correligionarios.
          Esta actividad existe en varios lugares, y de muchas maneras. Físicamente, puede tenerse áreas que pueden ser en la escuela, el centro comercial, la plaza, la urbanización, o vecindad. Pero el lugar tendrá algún funcionamiento según el normas establecidas para que genere un tipo de función en los que habitan el sitio. Las actividades varían desde solo pasar por el lugar, ser un habitante pasivo sin muchas responsabilidades, o ser director o supervisor de área. Dentro de los espacios, sea en forma micro o macro, existen funciones y responsabilidades que corresponden a alguien dependiendo de su rango. Como referencia puede tomarse un trabajo cualquiera donde un empleado cumple instrucciones de su supervisor, el cual puede que responda al jefe, quien es que controla lo que ocurre sobre la zona de labor. El lugar no necesariamente sea el mismo, ni las tareas semejantes; pero existen características que se repiten en cada zona, la cual crea una comunidad en cierto espacio.
          (También puede observarse sobre esto en el cuento de Julio Cortázar [1966], La autopista del sur, donde se desarrolla un sentido comunal en un área no común para ello. La congruencia del espacio lo hace la comunidad, la cual luego de ordenarse de manera física y social, se convierte en un espacio representativo de ciertas funciones en su delimitación. De cierta manera el espacio ofrece un sentido de relaciones hacia los habitantes. Y hacen que el espacio funcione para la razón por la que pudo concebirse.)
          Pero dentro del espacio las personas buscan un significante; se busca tener un elemento dentro del contexto habitado. Mircea Eliade menciona la heterogeneidad de los espacios sagrados, en donde existe una diferencia entre ese lugar sagrado (de significado para las personas) y lo pagano (lugar que común para la mayoría de las personas). No obstante, para todos ese símbolo no tiene el mismo significado, o sea que lo vuelve homogéneo al ambiente de algunos. Mas una masa de personas sentirá como su referencia componente característico sobre la zona delimitada por ellos.
          Dentro de ese espacio existen otros rasgos en donde se puede observar el razonamiento del humano y en donde se propicia el ordenamiento de éste. Para realizar esta acción se necesita una masa considerable de habitantes, los cuales son quienes dan el simbolismo al área. Para organizar esta aglomeración de seres se ponen en gestión una planeación física sobre el territorio. En éste hay una normas de capacidad sobre la forma de crecimiento, como el alcance que pueda tener en un nivel máximo. De qué manera y cómo funcionará cada zona dentro del terreno delimitado cobra importancia. Aparte de lo dicho, esa jerarquía de la que se hizo mención anteriormente da un sistema político para desempeñar con propiedad planes que ofrecen la funcionalidad del sitio.
          Como referente se puede hacer mención del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico, pues es interesante la percepción humana sobre su espacio. Existen un gran cúmulo de seres que utilizan el lugar, pero existe un ordenamiento de éste haciendo que su desempeño sea el adecuado para cada uno. De esta manera se divide el territorio para responder a estas acciones. Físicamente , el recinto se divide en sinnúmero de estructuras sobre su territorio. Cada una de éstas simboliza alguna función, las cuales son llamadas facultades. Asimismo, existen zonas homogéneas que se convierten en lugares que aglomeran gran parte de personas; como lo son el Centro de Estudiantes,  o los distintos espacios de recreación pasivo o deportivos. Mas dentro del espacio existen distintos significantes para los seres que ocupan en éste.
          Muchos de estos símbolos responden por el cual se siente representado. Por ejemplo, un estudiante de arquitectura tendrá su símbolo al edificio que lo distingue, la Escuela de Arquitectura. En éste sentirá diferencia al resto, pues encuentra en él razón para estar dentro del recinto, pero sobre todo, de establecer esa facultad como su punto relevante en éste (el Recinto de Río Piedras). Se puede decir que la Escuela de Arquitectura se convierte en espacio heterogéneo para el grupo que ocupa éste.
          Al observar el recinto en general, existe una referencia simbólica sobre la conocida Torre. Es así como se distingue sobre el ambiente común en donde se encuentra. La Torre funciona como referencia y ordenador del territorio, pues al ser el elemento distintivo, ésta rige cómo ocurra el movimiento en el espacio que demarca. Y dentro de esa organización espacial que ocurre, del cual denotan jerarquías físicas, se refleja en los habitantes.
          A partir de estas referencias espaciales es que se organiza el poder sobre éste. Primero, tiene un orden político donde los poderes predominantes se acomodan cerca al símbolo. De ahí parten los demás poderes, los cuales pueden identificarse de distintas maneras. Una de ellas es su identificación física, o sea, las estructuras que la conforman; y otra identidad más allá de la física es la acumulación de personas que puedan y la densidad que alcanza cada espacio. Como ejemplo, existen facultades como Arquitectura, o Derecho donde hay una cantidad menor de personas en su espacio. Por consiguiente tienen una densidad menor a Estudios Generales, o Educación.
          Como se aprecia en lo discutido, una cantidad determinada de personas hacen que exista un espacio con alguna acción para estos. Este espacio obtiene un elemento de símbolo que organiza el área de manera jerárquica, que luego se convierte en la manera en que se divide la política sobre el lugar. Dependiendo de la demarcación de la zona, los espacios tienen una determinada capacidad de habitantes, los cuales dan identidad al territorio donde se establecen. No todas las demarcaciones tendrán una densificación equitativa, puesto que existen poderes políticos que demarcan la capacidad sobre éstas.

1 comentario:

  1. En el arte el espacio es considerado uno de los elemento del diseño más dinámicos y complejos, en sí mismo, además, está compuesto por el resto de los elementos: línea, textura, color y forma. Si dentro de los elementos se vuelve complejo por su composición, peor será cuando analizamos su connotación en el uso cotidiano. También, el espacio lo podemos ver en las relaciones inter-personales cuando decimos: "dame mi espacio", o cuando nos acercamos demasiado a un desconocido e interrumpimos su "espacio personal". Para mí espacio, en sí mismo es un concepto básico, un elemento, lleno de diversidad cultural y disciplinas de estudio.

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